Difícil de creer, pero es la realidad, hasta el minuto 90, Colombia estaba en el Mundial FIFA Rusia 2018.
Opinión de John Bermúdez
¿Qué paso en eses escasos minutos que faltaban para que el partido terminara a favor de los cafeteros? Pues la verdad, unos dicen que fue culpa de Pekerman, otros que fue David Ospina, algunos aseguran que fue debido al bajón futbolístico por el que atraviesan Cuadrado, James, Cardona, Sánchez, etc.
Lo cierto es que la Selección Colombia, iba ganando 1-0, al minuto 80, y vinieron los cambios del técnico argentino para asegurar el partido (2-0), y saco del terreno de juego a Abel Aguilar para ingresar Barrios, que le daría más profundidad y podría aumentar el marcador; pues las cosas no salieron de esa forma, y lo único que le quito fue marca en la zona medular y creo un hueco inmenso por donde entraron para aniquilarnos.
En lo individual los colombianos estuvieron erráticos con la excepción del Tigre Radamel Falcao García, que puso su coraje, actitud, voluntad y el gol, que es lo que él sabe hacer; de ahí para allá haciendo un análisis personal, nos quedan debiendo plata.
Otro de los cambios que funciono fue el ingreso de Yimmy Chara, que le dio más profundidad y fue el que habilito al tigre para su gol.
Lo de Ospina, fue fatal, pero no se puede crucificar a un hombre que nos ha dado más alegrías que tristezas, lastimosamente este partido no era para esa clase de errores, pero se dieron y tenemos que lidiar con él.
Se perdió en casa una vez más, y se regalaron 12 puntos, que no se recuperaran nunca más, y por eso estamos donde estamos. Con un pie adentro y otro afuera del Mundial de Rusia 2018.
Tengo que darle al conjunto paraguayo, el crédito por lo que hicieron en el Metropolitano de Barranquilla.
Una primera parte donde presionaron, ajustaron las marcas y golpearon para ablandar a su rival. Luego para la parte complementaria, no se desesperaron, aguantaron inclusive hasta cuando iban en desventaja y luego aprovecharon los errores de nuestra selección y nos impusieron su garra guaraní.
Ellos, Paraguay sí hicieron la tarea, sabían que tenían que ganar y lo hicieron, así de fácil y de sencillo, aunque suene irónico.
No es justo que, a estas alturas de una eliminatoria, y con un proceso tan largo, y casi con los mismos jugadores, juguemos de esta forma. A NADA.
EN MI JUICIO PEKERMAN PECO, PERDIO Y SE NECESITA UN NUEVO PROCESO CON JUGADORES DE MEJOR NIVEL O AL MENOS QUE SE LES VEA ACTITUD, ENTREGA Y COLECTIVIDAD, Y ESTA SELECCION EN LOS ULTIMOS PARTIDOS HA CARECIDO DE ESTOS VALORES.
Respeto su opinión, pero esta derrota en casa y en un partido donde se tenía que ganar porque no había otra alternativa, no tiene excusas, porque las oportunidades se agotaron, y solo nos queda otros 90 minutos, frente al conjunto inca de más sufrimiento.
Una derrota dura de digerir, y más aún, cuando lo tuvimos todo para asegurar ese bendito cupo a Rusia 2018.
¿Ahora nos toca enfrentarnos a un seleccionado motivado, con un proceso nuevo y bien jugado, con jugadores con hambre y sed de triunfo, frente a una selección que viene de perder en casa, con jugadores que tienen un bajón futbolístico sin precedentes, y un futuro incierto donde no sabremos si se nos hará el milagrito o no?
Ojalá estos muchachos, los que anoche perdieron, despertaran de ese letargo futbolístico y nos dieran una faena de buen futbol, toque, mostraran jerarquía y encimaran varios goles frente a Perú, entonces nos devolverían la paz y la tranquilidad que nos merecemos, por el contrario, será una amarga navidad y otro mundial al cual no seremos invitamos por nuestros propios errores.
Todos los colombianos queremos que nuestra selección vaya al mundial, pero tenemos que ser realistas, con el futbol que viene Colombia mostrando en los últimos encuentros, no iremos a ningún mundial, así de fácil y sin ofender a nadie, la última prueba la tenemos este martes, frente a Perú, y ahí se cierran las eliminatorias, las posibilidades y el sueño de la cita mundialista.
Yo quiero que mi Colombia gane, como lo hice anoche frente Paraguay, pero la realidad me golpeo, y voy aprendiendo de estos duros golpes y de partidos como este, que son difíciles de digerir.
